Reseña | A la sombra del árbol violeta de Sahar Delijani
Título: "A la sombra del árbol violeta"
Autor: Sahar Delijani
Páginas: 288
Editorial: Salamandra
Precio: 20.00€
La casa de ladrillos rojos es grande y espaciosa y, en el jardín, una fuente azul comparte protagonismo con un enorme jacarandá centenario, que con su generosa sombra cobija un grupo de niños que juegan bajo un sol implacable. Pero esta bucólica escena esconde una realidad descarnada. Estamos en Irán, a comienzos de los ochenta, y el gobierno fundamentalista, liderado por el ayatolá Jomeini, ha iniciado una brutal depuración que afecta a miles de personas de todas las ideologías, incluso aquellas que han participado activamente en el triunfo de la revolución; perseguidas, encarceladas o aniquiladas, las víctimas del nuevo régimen dejan tras de sí miles de familias desamparadas.
El olvido que seremos de Héctor Abad Faciolince me marcó cuando me mandaron a leerlo en el instituto. La unión entre autobiografía, poesía, crudeza y belleza me impactó porque nunca me había acercado a un libro con una sensibilidad parecida. Solo con Domingo de Irène Némirovsky volví a lograr una sensación similar, hasta que mi pareja me recomendó de manera insistente que leyera A la sombra del árbol violeta. En sus páginas encontré de nuevo esa pasión que amo de la literatura.
Sahar Delijani utiliza su propia experiencia para contarnos la situación de Irán. Utiliza un lenguaje muy dulce y musical, pero con un filo capaz de cortar como si de una navaja se tratase. Las escenas duras son todavía más desgarradoras tal como se narran en A la sombra del árbol violeta. Cuenta las desgracias sin esconderlas, mostrando también el otro lado: el de los supervivientes y sus hijos. La belleza y la tristeza se unen y se mezclan. La autora consigue que lloremos de forma desconsolada, para acto seguido darnos una alegría que nos haga sonreír entre lágrimas. Las emociones son un elemento más de la obra, no un complemento, a través de ellas la trama se expande y adquiere todo su significado.
Si vemos entrevistas que Sahar Delijani concedió tras la publicación (habla un perfecto español) del libro es más fácil entender cuánto de ella hay entre sus páginas. Su propia historia le ha servido de base y, sin embargo, a la vez nos cuenta la de dos generaciones. En los medios occidentales es difícil que se cuele algo de información sobre Irán. Para conocer su estado, su cultura, política, etc. tenemos que realizar un esfuerzo consciente de búsqueda. Esta obra nos lo pone muy fácil, nos acerca a lo sucedido entre los años 80 y la primera década del siglo 21. Años en que los padres vivieron la esperanza para luego tenerla que esconder hasta que sus hijos la recuperaron. Esta vez, sin embargo, el régimen no escondió su respuesta represiva. Es el relato de los que se quedan y también el de los que se van buscando otro porvenir, aunque no dejan de llevar en su corazón la ilusión de un futuro mejor. Recupera la misma sensación que nos deja la película Persépolis.
A la sombra del árbol violeta es mi mayor descubrimiento literario desde Iréne Némirovsky. Una novela a la que volveré muchas veces. Un recuerdo de que todavía queda mucho por lo que luchar. El reflejo de que no podemos apartar la vista porque la realidad continúa ahí fuera.